Creative Commons
“Creative Commons es una organización que permite a la gente publicar sus obras creativas bajo una licencia que permite más flexibilidad que el <<todos los derechos reservados>> que viene por defecto en las leyes sobre derecho de autor". (Merritt, 2005)
In conclusion, commons are not only the means by which we share in an egalitarian manner the resources we produce, but a commitment to the creation of collective subjects, a commitment to fostering common interests in every aspect of our life. Anti-capitalist commons are not the end point of a struggle to construct a non-capitalist world, but its means. For no struggle will succeed in changing the world if we do not organize our reproduction in a communal way and not only share the space and time of meetings and demonstrations but put our lives in common, organizing on the basis of our different needs and possibilities, and the rejection of all principles of exclusion or hierarchization.
Al ser una forma de producción generalizada, no es responsable involucrar un intercambio monetario, ya que generaría una decadencia en los contenidos por basarse en una obligación, siendo que es una participación principalmente voluntaria para poderse llevar una verdadera transformación social que resulte favorable al fácil acceso y el uso de los recursos comunes.
We start with a historical perspective, keeping in mind that history itself is a common even when it reveals the ways in which we have been divided, if it is narrated through a multiplicity of voices. History is our collective memory, our extended body connecting us to a vast world of struggles that give meaning and power to our political practice.
Estoy de acuerdo con el compromiso que tiene un autor por compartir la información de sus contenidos en beneficio de una comunidad que se puede educar con base a las necesidades de su receptor, demostrando que, sin la necesidad de condicionar económicamente a los involucrados, se puede transformar favorablemente la organización social de las reproducciones.
So far Maine lobster fishers have been considered a harmless exception confirming the neoliberal rule that a commons can survive only in special and limited circumstances. Viewed through the lens of class struggle, however, the Maine lobster common has elements of an anti-capitalist common in that it involves workers' control of some of the important decisions concerning the work process and its outcomes. This experience then constitutes an invaluable training, providing examples of how large-scale commons can operate. At the same time, the fate of the lobster commons is still determined by the international seafood market in which they are embedded. If the US market collapses or the state allows off-shore oil drilling in the Gulf of Maine, they will be dissolved. The Maine lobster commons, then, cannot be a model for us.
Mientras que Caffentzis y Federici plantean Creative Commons “anticapitalistas”, el teórico investigador belga, especializado en la tecnología, cultura e innovación en los negocios Michel Bauwens afirma que “la propiedad entre iguales es una forma postcapitalista porque no es excluyente y crea un patrimonio común con costes marginales de reproducción” (Sonvilla, 2012, p. 28), dando a entender que el intercambio individual de la expresión creativa determina el nivel en que se comparte y, en cambio, se puede optar por una ‘General Public License’ (Licencia Pública General), la cual exige que todo aporte que genere un cambio en lo común, también pertenece a todos. Referencia
What do we mean by ‘anti-capitalist commons’?How can we create, out of the commons that our struggles bring into existence, a new mode of production not built on the exploitation of labour?How do we prevent commons from being co-opted and becoming platforms on which a sinking capitalist class can reconstruct its fortunes?
El artículo escrito por George Caffentzis, profesor de filosofía y escritor sobre el pensamiento social y político, y Silvia Federici, activista feminista, maestra y escritora; manifiesta como la información en la era digital elabora una base de datos sobre la propiedad intelectual, influyendo en los factores económicos, sociales y culturales de los internautas. Con esto, los modos de producción informática se vuelven masivos y generan dependencias lucrativas por adquirir una experiencia de aprendizaje mientras se genera un intercambio comunitario, el cual incrementa los intereses capitalistas y la desigualdad comercial de la reproducción de contenidos.