Alan Kay dice que, desafortunadamente, cuando el ayudó a nombrar la Programación Orientada a Objetos, eligió un mal nombre, pues debió ser Programación Orientada a Mensajes, pues los objetos son una idea menor y lo clave son los mensajes.
De acuerdo, así todo sería más claro y con más sentido. Podríamos empezar a nombrarla así.